Sobre las posibles fallas en la investigación, el ministro sostuvo que “siempre van a haber quejas” y afirmó que su trabajo es “empoderar al jefe” de la Policía Federal.
Asimismo, subrayó que, a esta altura, “no hay nadie que no crea que haya sido el objetivo matar a la vicepresidenta”, por lo que planteó que “hay que permitir que los analistas lleguen al fondo de la cuestión”.
Por otro lado, Aníbal Fernández reveló que mantuvo una reunión con la Vicepresidenta el pasado jueves y que ella no le reprochó “absolutamente nada de lo que pasó”.
“Charlamos de diferentes temas. Para mí, ella y Néstor (Kirchner) son mi familia”, concluyó el ministro.