Ganadores, zapateros y perdedores con la inflación por las nubes
Con la suba del tipo de cambio oficial del 20,3% versus una inflación del 50,7% muchas empresas comienzan a tener fuertes pérdidas, el precio de sus productos sube por la escalera, mientras que los costos y gastos de estructura lo hacen por el ascensor, esto produce una fuerte pérdida en la mayoría de las empresas, que tienen que recurrir a expandirse a mayor escala para poder lograr el punto de equilibrio.
En el escenario actual, muchas empresas no pueden lograr escala ante la escasez de insumos, el gobierno no cuenta con un alto stock de dólares en las reservas y tiene que recurrir a equilibrar la balanza cambiaria con restricciones a la importación, esto produce una menor posibilidad de que la economía crezca, por ende corta las expectativas de mayor recaudación y, para arribar a las metas de déficit fiscal, se tiene que trabajar solo sobre el gasto, ya que los recursos difícilmente suban en este contexto.
Los que fueron tenedores de acciones tuvieron un excelente año, ya que la revalorización de los papeles superó holgadamente la inflación anual, en esto jugó a favor la fuerte suba de los precios de las materias primas.
Los que apostaron por plazo fijo o bonos ajustados por inflación tuvieron un año zapatero ya que empataron el resultado, pero tuvieron fuertes ganancias en dólares, ya sea medido bajo la versión formal o informal.
Los que acopiaron dólar blue vienen con un año difícil, ya que en los últimos 12 meses volvió a mostrar una suba menor a la inflación, el dólar blue subió muchísimo en los años 2018, 2019 y 2020, en el año 2021 subió menos que la inflación, y creemos que en el año 2022 podría estar mucho más tranquilo, ya que la dinámica económica muestra que la suba vendrá por el precio de los activos y las materias primas. La iliquidez del año 2022 atenta contra la suba del dólar blue.
Los bonos en dólares muestran una baja del 17,1% en 12 meses, es una muy mala performance ya que refleja la poca credibilidad del gobierno argentino. Sin embargo, podría ser tomado como una oportunidad de compra, ya que Argentina respecto a un año atrás muestra una mejor perspectiva de mediano y largo plazo. En primer lugar, el gobierno perdió las elecciones de mitad de mandato, con lo cual hay posibilidades de un cambio político y económico a futuro, estamos ante la posibilidad de un acuerdo muy favorable con el FMI, el gobierno nacional tiene dos años por delante en donde va a dar pelea para quedarse en el poder y para ello tendrá que apostar por un crecimiento económico. Si los bonos AL30D recuperaran el valor de un año atrás cuando las condiciones económicas y sanitarias eran más desfavorables, la suba que tendría por delante sería del 20,6%. No hay dudas que hay que acopiar.
Conclusiones
- El mercado mundial muestra una realidad muy distinta a la de un año atrás, antes Argentina era una oveja negra en una manada de ovejas blancas. Hoy seguimos siendo una oveja negra, pero estamos insertos en una manada de ovejas negras. El mundo tiene inflación, Estados Unidos tiene la inflación más elevada en 40 años, el 7,5% anual, es probable que la tasa de corto plazo en Estados Unidos suba a niveles del 1,75% anual, la tasa de retorno del bono de tesorería a 10 años se ubica en el 2,0%% anual. La inflación ya no es un fenómeno focalizado solo en nuestro país como sucedía hace 12 meses atrás.
- La suma de la reestructuración de la deuda privada más la deuda con el FMI debería ordenarnos financieramente y dar espacio para un reacomodamiento en precios. Lo bonos argentinos que cotizan en torno del 30% de paridad podrían dar un salto en sus cotizaciones y ubicarse en torno del 40% de paridad, es una locura tener una tasa de retorno del 28% en los bonos con vencimiento en el año 2030, creemos que esa tasa debería bajar como sucedió luego de la reestructuración de deuda privada y acuerdo con el FMI en Ecuador.
- Los bonos de la deuda no solo son un activo especulativo, esos mismos títulos se pueden dejar en garantía en el mercado de capitales para obtener financiamiento, con un aforo del 80% podés conseguir financiamiento en pesos a tasas del 40% anual, que hoy es una tasa muy inferior a la de un descubierto bancario.
- El escenario para el año 2022 seguirá siendo de alta inflación, chocolate por la noticia dirían los chicos, el desafió es ver cuándo el dólar oficial comience a igualar a la tasa de inflación. En el mes de enero el dólar oficial subió el 2,2% y la inflación fue del 3,9%, la brecha es de 1,7 puntos porcentuales. Se derramaron litros de tinta describiendo una mayor suba del dólar oficial, lo que no se dijo es que la brecha contra la inflación sigue siendo elevada. En febrero todo hace presuponer que el dólar oficial subirá el 2,6%, mientras que la inflación podría ubicarse por encima del 4,0%. En este camino vamos a una crisis cambiaria, ya que con este tipo de cambio en $ 106,50 alienta más a las importaciones que a las exportaciones.
- Los bonos de la deuda argentina podrían ser los activos que más suban en el año 2022 si Argentina se pone los pantalones largos, cumple el acuerdo con el FMI, ajusta el tipo de cambio oficial y sienta las bases de un nuevo plan económico.