Ayer al mediodía, un jovencito que se encontraba en el Complejo Salto Berrondo de Oberá, dio aviso a los agentes municipales que había encontrado un cuerpo sin vida en el arroyo cercano. Visiblemente consternado, el jovencito y su familia no dudaron en dar aviso del hallazgo. «Está muerto, es un hombre y tiene una guitarra», afirmó el muchacho. Rápidamente, los empleados municipales comunicaron de la situación a los efectivos de la Comisaría 3ra ubicados en el lugar donde se llevaba a cabo un encuentro deportivo.
Tras tomar conocimiento, la policía acudió al lugar donde el joven había encontrado el cuerpo sin vida del hombre, a unos 500 metros aproximadamente desde el salto mayor de agua.
Una vez allí, los uniformados constataron el hecho, y a través de averiguaciones establecieron que se trataría de Esteban G., quien desde los primeros días de noviembre se encontraba acampando en el predio junto a su pareja. Fue ella quien realizó la denuncia de la desaparición, y desde ese momento se realizaron operativos de búsqueda sin éxito. Increíblemente no estaba lejos del lugar, pero no dieron con su paradero hasta ahora.
Los bomberos voluntarios de Oberá extrajeron el cadáver del agua y la Policía Científica de la Unidad Regional II examinó el cuerpo y halló una soga alrededor del cuello del hombre.
El Juzgado de Instrucción de Oberá ordenó la autopsia y el traslado hasta la morgue judicial de Posadas.
