Se espera que en la reunión en Casa Rosada se hable acerca de los términos, las condiciones y los alcances del gravamen a la renta inesperada. El Gobierno buscará detallar y aclarar a los empresarios cuáles son los parámetros de la medida y cuáles serían los efectos sobre el sector privado.
A diferencia de las últimas mesas que armó el Gobierno nacional, no habrá presencia sindical. La Confederación General del Trabajo (CGT) será el gran ausente en el encuentro. En efecto, desde fines de marzo y hasta los primeros días de abril, el Poder Ejecutivo auspició una serie de encuentros tripartitos para coordinar un plan de medidas que apuntan a controlar los precios y actualizar los salarios, en el marco de la aceleración inflacionaria. Entre otras cosas, de esa ronda de reuniones salió la iniciativa de acelerar las negociaciones paritarias de sectores clave de la industria y la producción.
La letra chica de la iniciativa de renta inesperada todavía no está. Hasta el momento, Guzmán indicó que se apunta a las empresas que tuvieron ganancias netas superiores a $1.000 millones en el año, lo que deja un universo de entre 50 y 100 grandes empresas que se beneficiaron por la suba de precios de los commodities.
El proyecto del ministro de Economía apunta a lograr fuentes de financiamiento para cubrir paquetes de gasto social, como la ampliación de la tarjeta Alimentar, el nuevo IFE y el bono a jubilados. Las metas fiscales se cumplieron en el primer trimestre del 2022, algo que el funcionario explicará en un informe ante el staff del FMI.