Tiempo Misionero: comunicación con responsabilidad, herramienta al servicio de la ciudadanía.
El periodismo nació con objetivos, con mística, con sentido político, ideológico, social, con sueños de revolucionar desde el despertar reflexivo. También con sentido de responsabilidad. La comunicación es fundamental para el ejercicio de derechos ciudadanos. Contribuye al encuentro de la sociedad y las personas. Hoy en el periodismo digital sobra la información como commodity, y falta pensamiento crítico, reflexión sobre lo que nos está ocurriendo, y pretendemos generar información con más empatía y cercanía,
En la sociedad abierta, las redacciones cerradas no hacen más que agravar sus problemas de sustentabilidad. Necesitamos dinamitar fronteras y construir la manera de cocrear valor periodístico con las audiencias y otros actores sociales, para abandonar la lógica unidireccional y abrazar la lógica de la red.
Necesitamos nuevos productos periodísticos comunicacionales, buscamos una nueva forma de relacionarnos con la ciudadanía.
Creemos que el periodismo y la comunicación tienen un propósito, y es ayudar a entender la realidad, además de contarla. Las historias y los hechos que contamos nos hablan de nosotros como sociedad y como personas, nos ayudan a entender, a entendernos, nos provocan alegría o pena, despiertan nuestra indignación o nuestra compasión, son nuestro espejo y la voz personal y colectiva de nuestros sueños. Las necesitamos, porque estas historias nos hacen más humanos. Desde Tiempo Misionero creemos que el periodismo no sólo sirve para contar el mundo, también para cambiarlo.
En tiempos líquidos y veloces, un medio del siglo XXI debe ayudar a sus lectores a levantar la mirada, y convertirse en plataforma de descubrimiento intelectual, debate, participación y pertenencia.
Se parte de una nueva construcción comunicacional.
Editorial Tiempo Misionero
