China intentará este viernes posar en Marte un pequeño robot teleguiado, en una operación especialmente compleja que permitirá analizar la superficie de ese planeta y refleja las ambiciones espaciales del país asiático.
China lanzó en julio de 2020 hacia Marte su sonda “Tianwen-1”, que tardó siete meses en recorrer los 55 millones de kilómetros de distancia al planeta rojo, equivalente a 1.400 veces la vuelta a la Tierra.
La sonda, que llegó en febrero a la órbita de Marte, consta de tres elementos, uno de ellos es un aterrizador que se posará en las próximas horas.
El módulo permitirá a un robot teleguiado, “Zhurong” (dios del fuego en la mitología china) salir para analizar la superficie del planeta.
Si bien no se comunicó de ninguna fecha u horario oficialmente, la agencia espacial china (CNSA) habló inicialmente de una posible llegada entre mediados de mayo y mediados de junio, consignó la agencia AFP.
Este viernes precisó que la operación debía producirse entre “la mañana del 15 de mayo y el 19 de mayo”, pero había una gran expectativa tras el anuncio por parte de un eminente especialista de que el robot teleguiado se posaría en Marte el sábado 15 por la mañana.
El jefe del programa de exploración lunar, Ye Peijian, prevé que el módulo se pose las 7:11 el sábado hora de Pekín (23H11 GMT del viernes), según los medios chinos.
Si el proceso se lleva a cabo con éxito, el robot permitirá estudiar la composición de las rocas del planeta rojo.