Hasta ahora C.1.2 fue detectada en todas las provincias sudafricanas, así como en otras partes del mundo, especialmente en China, en Mauricio, Nueva Zelanda y Reino Unido.
No es sin embargo muy frecuente para ser clasificada “variante digna de interés” o “variante inquietante”, como lo son las variantes delta (la surgida en India) y beta (aparecida en Sudáfrica en 2020), ambas muy contagiosas.
Los científicos del NICD aseguraron el lunes que C.1.2 no está “presente sino en bajos niveles” y que es muy temprano para determinar su evolución.
“A este nivel, no tenemos datos experimentales para confirmar como reacciona en términos de sensibilidad a los anticuerpos”, explicó Penny Moore, investigadora en el NICD.
Sudáfrica es el país más afectado del continente africano, con 2,7 millones de casos registrados hasta ahora, de los cuales 81.830 muertes