El Boulevard Ballester al 4800 está cortado al tránsito porque hay fiesta en la zona comercial “más pudiente”, como destaca una referente trans del barrio mientras acomoda las sillas ubicadas en la calle que esperan a quienes vienen a cortar la cinta del flamante emprendimiento estético.
Dentro del local blanco, teñido solo por los colores de esmaltes de uñas y de flores y plantas que van llegando a modo de obsequios, hay todo lo necesario para poner en marcha la peluquería que estrena Cecilia ‘Checha’ Merchan secretaria de Políticas de Igualdad y Diversidad del Ministerio de las Mujeres Géneros y Diversidad.
Una de las ocho trabajadoras, entre peluqueras y manicuras y pedicuras de ‘Fuego’ , es la encargada de atender a la funcionaria.
“Son hermanas que nos transformaron, nos enseñaron, nos cambiaron la cabeza, venimos a festejarlas y acompañarlas. Celebramos que hagan lo que desean”, comparte Merchan que disfruta cada minuto del acto.
Hay risas, nervios y estallan los aplausos cuando llega Flor de la V.
“Una de las nuestras”, dice una de las peluqueras que llora y se retoca el rimel corrido.
También contiene el llanto Flor de la V. cuando la invitan a hablar en el escenario improvisado en la vereda: “Es por acá, tenemos que generar nuestros trabajos con los apoyos necesarios”, dice.
Y cuando habla con Télam confirma su emoción “por lo que estamos viviendo hoy y lo de ayer, cuando se promulgó la ley de cupo laboral trans. Estamos celebrando una Argentina mucho mas justa, una Argentina que siempre soñé para mis hijos”.
La fiesta se amplía: llega el diputado nacional del Frente de Todos, Leonardo Grosso, el intendente de San Martín Fernando Moreira, funcionarias de los ministerios bonaerense y nacional de la Mujeres, y de organismos y organizaciones varias.
El acto inaugural mezcla la elemental y necesaria formalidad, que deja en claro la articulación de las organizaciones territoriales, las militantes trans y la dirigencia política, que permitió concretar este proyecto productivo.
La historia es breve e intensa: el Teje San Martín nació el año pasado en el inicio de la pandemia para afrontar la emergencia en que se encontraba la población trans de la zona, y de ese encuentro nació ‘Fuego’.
“En el comienzo de la pandemia había compañeras en situación de calle o de trabajo sexual y empezamos a unirnos, a hacer trabajo colectivo para afrontar la emergencia que se vivía en la comunidad trans: falta de alimentación, de recursos, de retrovirales, de acceso a la salud o al IFE al que no accedían por falta de documentación”, resume en una charla con Télam, Paola Acevedo referente de El Teje San Martín y trabajadora de la Secretaría de Salud del municipio.
“En el comienzo de la pandemia había compañeras en situación de calle o de trabajo sexual y empezamos a unirnos, a hacer trabajo colectivo para afrontar la emergencia que se vivía en la comunidad trans”
PAOLA ACEVEDO
Fueron subsanando todos esos problemas organizándose y articulando con el Estado, y además tienen un comedor y un merendero.
“Esta red nos organizó y nos salvó en pandemia. Articulamos con el Estado y fuimos nosotras, nuestras voces trans, las que estuvieron al frente. Invadimos todo con nuestro fuego”, lee Paola, cuando le toca dar el discurso en nombre de sus compañeras.
Agradece a muchas personas, pero sobre todo “nos agradecemos a nosotras mismas por crear este pedazo de mundo en una sociedad donde aún hay personas que nos maltratan, discriminan o matan. Acá estamos, creando trabajo donde no había”, recita y conmueve.
Entre el público hay mucho personal policial, porque el centro de estética está frente a una comisaría.
El dato no es menor y una de las históricas referentes de la comunidad y fundadora de Casa Trans, Marcela Romero, lo hace notar.
“Esta red nos organizó y nos salvó en pandemia. Articulamos con el Estado y fuimos nosotras, nuestras voces trans, las que estuvieron al frente. Invadimos todo con nuestro fuego”
PAOLA ACEVEDO
“Estamos inaugurando un lugar de trabajo trans frente a una comisaría. Todo un símbolo. Tenemos que ser visibles, como hoy, como ahora, porque la oscuridad es lo que lleva a la pobreza y a la exclusión”, reflexiona, y aplauden también y tímidamente, algunos policías.
Hay corte de cinta y recorrida por el local, mientras una artista hace retratos, y Mary, la dueña de la rotisería lindera a ‘Fuego’ recibe la visita de Flor de la V y del diputado Grosso que le agradecen la buena predisposición.
Su local de comidas quedó en medio del festejo.
Hay baile, hay artistas que homenajean a La Pantoja y a Lía Crucet, y un niño en silla de ruedas pide a su papá detenerse y sonríe y baila con la parte de la cara que el barbijo deja ver.
Guillermo Castro, dirigente social, uno de los impulsores de El Teje se permite las lágrimas en el cierre de fiesta.
Las ocho mujeres trans que inauguraron ‘Fuego’ se quedan charlando con Flor de la V. Comparten recuerdos no felices de discriminación y situaciones adversas, y sobre todo, se alientan y disfrutan, porque este jueves abrió sus puertas un proyecto que es mucho más que un centro de estética.
