Los otros ítems demandados por el camionero son la extensión a todos los asalariados del cobro de asignaciones familiares (en la actualidad lo perciben 2,5 millones de un total de 6 millones de empleados en relación de dependencia) y la exención de Ganancias sobre el aguinaldo. Respecto de este último rubro, la presión de los Moyano logró que una parte sustantiva de los trabajadores afiliados al gremio de choferes quedara a salvo del peso de ese gravamen al incorporarse en el Presupuesto 2023 un capítulo con exenciones para el personal abocado a servicios de larga distancia.
Aunque existe una relación cordial con Massa en los últimos años, Pablo Moyano se mostró inflexible con el ministro y su equipo desde que asumió en Economía. Su primer señalamiento fue contra el secretario de Comercio, Matías Tombolini, a quien el camionero cuestionó en duros términos por una declaración en la que supuestamente minimizaba los efectos de la inflación, y por su afán en el abastecimiento regular de figuritas del Mundial de fútbol.
A diferencia del grueso de la CGT, que apuesta por una candidatura presidencial de Massa o de un gobernador peronista, el hijo de Hugo Moyano había cifrado sus expectativas en los movimientos electorales de Cristina de Kirchner. Esa intención chocó contra el anuncio de la propia vicepresidenta de que el año próximo no será candidata “a nada” luego de la sentencia en su contra a seis años de prisión e inhabilitación perpetua para el ejercicio de cargos públicos en la causa Vialidad.