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domingo, 13 octubre, 2024
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    El primer canoísta misionero en un Selectivo nacional

    Jauriel Rojas (18) marcará el sábado un hito para el canotaje provincial: será el primer misionero en competir en un Selectivo Nacional en canoa olímpica, una modalidad con pocos adeptos en el país. De qué se trata y cómo se metió en ese nuevo mundo.

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    El próximo sábado, cuando se inicie el primer Selectivo Nacional pospandemia organizado por la Federación Argentina de Canoas (FAC), el equipo misionero marcará un hito que va más allá de los resultados. Es que será la primera vez que un palista de la tierra colorada compita a ese nivel en canoa olímpica, una modalidad poco practicada en el país pese a que forma parte del programa de los Juegos Olímpicos desde Berlín 1936.

    El protagonista principal de ese debut será Jauriel Rojas (18), quien se animó al cambiazo luego de seis años arriba del kayak. “La pandemia me ayudó a madurar la idea; al principio me costó, estuve casi siete meses para agarrarle la mano, pero ahora las expectativas son altas”, se ilusiona el juvenil del Club Río Paraná ante EL DEPORTIVO.

    A diferencia del kayak, donde por ejemplo el competidor va sentado, en la canoa olímpica -la modalidad también se conoce en Europa como “piragüismo”- el atleta va arrodillado y cuenta con una sola pala que, a su vez, tiene una sola hoja. Y como si lo anterior no fuera suficiente, la embarcación es mucho más angosta. Se trata de un desafío para nada sencillo al que Jauriel, tras mucho de análisis, le dijo que sí.

    “Desde hace bastante tiempo me gustaba la modalidad porque era un bote raro, diferente, que me llamaba mucho la atención. Además, acá en Posadas no había ninguno. Y con todo esto de la pandemia, durante el parate fui madurando la idea y me decidí”, explica Jauriel, quien se inició en el canotaje a los 12 años e hizo todos los pasos en el Club Río Paraná: primero fue el kayak, luego el K1, la llegada al preequipo y, finalmente, al equipo principal de competición de la entidad.

    Y cuando llegó la hora de volver al club, Rojas ya no tenía dudas. “Ahí hablé con mis profes, Nico Robin y Adrián Palamarchuk. En realidad, lo veníamos hablando de antemano, pero ahí les dije que quería ir por la canoa olímpica. Entonces, con Adrián nos fuimos a Gualeguaychú, a hacer un curso sobre la modalidad”, rememora Jauriel.

    Esa capacitación fue previa al coronavirus y allí ambos pudieron compartir con los integrantes de la Selección Argentina de la especialidad. “Nos enseñaron lo básico, cómo pararse, cómo armar el bote y los tacos donde apoyas las rodillas, cómo remar. Y como justo llegó el parate, me puse a mirar muchos videos en casa y a practicar movimientos y rutinas”, señaló.

    Claro que a la decisión había que acompañarla. Y esta vez, con el bolsillo. Es que, como bien aclaró Jauriel, no había en la zona una canoa olímpica, más allá de un casco viejo en el club, inutilizado para competir. Y hubo que hacer otro sacrificio. “Yo tenía mi K1, así que se lo vendí a una compañera del club y con eso pude comprar una canoa usada a un señor de Goya, Corrientes. Me puse a buscar en Facebook, el hombre la tenía en su casa y me la mandó”, recordó Jauriel respecto a la transacción, que le costó alrededor de 20 mil pesos. “Estaba lejos de comprar una nueva; las más económicas salen entre 45 y 60 mil pesos”, agregó. Todo un presupuesto.

    Con el curso realizado y la canoa en sus manos, llegó una nueva etapa para el palista del barrio Santa Helena de Garupá: bajar al agua. Y allí confirmó que no sería fácil. “Es mucho más angosta que un K1, no tiene más de 80 centímetros de cancho. La cuestión es que llegué ese día al club, el río estaba un poco movido, pero bajé igual con la canoa. Y fue todo nuevo”, rememora Jauriel, quien subraya que le llevó todo un semestre ponerse a punto: “Al principio me costó, era subir al bote y caerme al agua una y otra vez. Era todo un logro hacer diez metros sin caerme. Y era caerme, volver a la costa y seguir intentando. Así todos los días, de lunes a sábados. Me costó casi siete meses agarrarle la mano, pero se pudo. Ahora ya la estoy ‘piloteando’ de a poquito. Todavía me falta mucho por aprender, pero las expectativas son altas para este Selectivo”.

    Lo cierto es que Jauriel logró agarrarle la mano a la canoa olímpica y el sábado en Nordelta, Buenos Aires, marcará un antes y un después: será el primer misionero en participar bajo la modalidad en un Selectivo Nacional. “Es la primera vez que un misionero va a competir con una canoa olímpica. Eso me genera una alegría enorme, me enorgullece representar a mi provincia y ser el primero en hacerlo. Además, siento que motivo a otros chicos del club y de la provincia a que se sumen, a que prueben todos los botes, que no se queden con uno solo”, alienta Rojas.

    Así las cosas, según el cronograma de la FAC, Jauriel competirá el sábado en los mil metros, en canoa olímpica. “Mi mejor tiempo en esa distancia es de 6m45s”, cuenta, con la ilusión puesta en ganarse su lugar en la Selección Argentina de su categoría. Es que, lo ya dicho, tanto en el país como en el continente no son muchos los que practican la modalidad. “A nivel nacional, contando todas las categorías, seremos alrededor de veinte palistas. En el curso de Gualeguaychú se habló de que hay pocos en Argentina y hacen falta más para representar al país a nivel internacional”, recuerda Jauriel.

    Ese es el objetivo a corto plazo. Y en el futuro, por qué no, soñar con un Juego Olímpico. “La expectativa siempre está. El sueño es estar primero en la Selección y luego en un Juego Olímpico. Espero que me vaya bien, creo que así será. Voy a Buenos Aires con muchas ganas, con la alegría inmensa y con el privilegio de representar a Misiones”, cerró Jauriel, el palista que se animó a cambiar.

    Todo listo para partir

    El equipo de competición del Club Río Paraná, comandado por los profes Robin y Palamarchuk, emprenderá viaje hacia Buenos Aires con un team conformado por Micaela Gasc, Valentina Bogado, Octavio Bareiro, Leonel Cabrera, Ian Hobecker y Lisandro Venini, quienes competirán en la divisional Junior; mientras que Jauriel Rojas lo hará en la Sub-21. El objetivo de todos es ganarse un lugar en la Selección Argentina y encarar así los compromisos internacionales fijados para la temporada.

    Fuente: (Primera Edición)

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