“Ahora como China es grande y poderosa todos miramos para otro lado, a veces le tiramos una patadita, pero les mandamos felicitaciones por los 100 años del Partido Comunista chino. Hay que dejarse de joder”, reclamó el Pepe.
Y pidió: “Hay que recuperar, recordar, lo que es el no intervencionismo y respetar lo que pasa en cada casa. Lo de Macri, enviando armas a Bolivia, eso ya es meterse en casa ajena de forma opresora”.
“Uno puede tener una opinión, pero si se pone a opinar a viva voz sobre lo que pasa en la casa de su vecino, usted tiene un conflicto en puerta, podrá tener una opinión, pero no se meta en los líos de la casa de al lado”, advirtió el ex mandatario uruguayo y señaló que “vivimos en un mundo en el que el ala imperial y dominadora cree que tiene derecho a opinar y meterse en cualquier parte, y si no levantamos la bandera de la autodeterminación el mundo se va a hacer invivible”.
Y sentenció: “Para convivir hay que empezar por respetar lo que es diferente. No se cómo funcionará la globalización si no comprendemos esto que es elemental”.
Mujica recordó que América latina es objeto de intervenciones desde hace décadas, “desde que Estados Unidos le sacó la mitad de su territorio a México, pasando por el canal de Panamá, Nicaragua… se pueden hablar horas sobre las intervenciones, luego vinieron las intervenciones indirectas con la Escuela de las Américas y pensaron que esa política se podía extrapolar al resto del mudo”.
“Cuando hablé con (Barack) Obama hace muchos años en un almuerzo, sentados los dos a la mesa, le dije ‘vete de Afganistán, Alejandro se tuvo que ir’ y miren los años que han pasado y se tuvieron que ir”.
Y concluyó: “El tema es que en nuestros países, muchos por intereses propios, ofician de capataces de estos poderes y no hay subordinación peor que la que empieza en la cabeza, creer que como el mundo ha sido así no puede ser de otra manera, pero si son los hombres los que hicieron el mundo así entonces son los propios hombres los que lo pueden cambiar. Depende de nosotros mismos y eso hay que metérselo en la cabeza”.