Tras el ataque que recibió el Estado de Israel el domingo por parte de Irán, el Ministerio de Seguridad de la Nación ordenó que se emita un alerta amarilla y se reforzara la seguridad a todas las instituciones judías y a representantes del Estado israelí en Argentina. En este contexto, la zona de la Triple Frontera (Argentina, Paraguay y Brasil), también fue considerada como un “área sensible” que merece protección.
Respecto al ataque que recibieron el último sábado, relató que “mentalmente” estaban preparados, porque la unidad de información de Israel semanas antes había anticipado a la ciudadanía que podía suceder una ofensiva.
“Ellos se encargan de avisar a los civiles sobre los temas relacionados a terrorismo. Sugieren cuándo es necesario esperar más tiempo en el bunker si suenan sirenas, cuánto tiempo tenemos desde que suenan hasta que caiga un misil en la zona, por ejemplo, qué hay que hacer y cómo, si abastecernos o no de comida y agua, entre otras cuestiones”, precisó.
Sin embargo, Cesia sostuvo que si bien se vivieron momentos de tensión el sábado, luego “todo volvió a la normalidad”.
Además, ella tiene un hermano que en su momento había sido llamado a formar parte del ejército y hace poco lo liberaron. “Estamos con la mano en el pulso, como se dice acá, para ver si lo llaman de nuevo o no por lo que pasó el sábado. Acá el día a día podría decirse que transcurre normal, pero lo cierto es que nada es normal desde el 7 de octubre pasado, un amigo mío no volvió todavía desde esa fecha”, contó la entrevistada.
Sobre la presencia de Estados Unidos y otros países, Cesia dijo que notan mayor control en las zonas fronterizas de Jerusalén, pero no en la ciudad precisamente.